Puerto de Nogueruelas / San Bernabé

El puerto que asciende desde la población turolense de Mora de Rubielos en dirección a Nogueruelas nos ofrece una experiencia ciclista ideal para quienes buscan puertos largos, sostenidos y con paisajes abiertos. Con sus casi 15 kilómetros de subida y una altitud final que ronda los 1550 metros, este puerto nos sumerge en la tranquilidad y belleza natural de la Sierra de Gúdar, en el corazón de Teruel.

Desde los primeros kilómetros, la carretera se presenta ancha y con buen firme, permitiendo rodar con comodidad y evitando mayores problemas con el asfalto. El tráfico es escaso, lo que convierte la experiencia en algo casi exclusivo para quienes deciden afrontar la ascensión en bicicleta. El entorno destaca por su silencio, roto solo por el canto de los pájaros o el cencerro lejano de alguna vaca, elementos que animan a practicar cicloturismo y a saborear el camino a un ritmo relajado.

El recorrido se divide en tres fases bien diferenciadas. La primera parte, de unos cinco kilómetros, transcurre con rampas sostenidas al 4-5%, ideales para encontrar el ritmo e ir calentando piernas. Posteriormente, un pequeño tramo de ligera bajada nos ofrece una tregua antes de afrontar los aproximadamente seis kilómetros finales tras Nogueruelas, donde el puerto se muestra más exigente y constante, con rampas que llegan a marcar el 8% en alguno de sus puntos más duros.

A lo largo de la subida se puede disfrutar de vistas panorámicas y encantadores detalles del entorno, como pequeños embalses y la silueta de las poblaciones vecinas a lo lejos. En los tramos más altos, la carretera se abre y aumenta la sensación de amplitud, aunque hay que tener en cuenta que la sombra escasea y, en los días de verano, el sol puede hacerse notar. Por el contrario, en invierno es habitual encontrar bajas temperaturas debido a la altitud y la exposición al viento.

Durante la ascensión se cruza el municipio de Nogueruelas, que da nombre al puerto. Esta zona central es más rectilínea y abierta, con menos vegetación y una sensación de amplitud que caracteriza la subida. En los últimos kilómetros el trazado recupera algo de arbolado, regalando agradables sombras y nuevas vistas antes de llegar a la cima.

Durante el recorrido contamos con la compañía de otros ciclistas como Miriam y Diego, quienes nos acompañan en algunos tramos, compartiendo impresiones sobre el entorno y lo llevadero del puerto. Se resalta lo bien que se mantiene el asfalto hoy en día, facilitando una ascensión cómoda tanto para quienes suben a ritmo tranquilo como para quienes buscan entrenar y mejorar su fondo.

Al coronar, el cartel de puerto de Nogueruelas nos da la bienvenida a 1.549 metros de altitud. Desde ese punto, la bajada continúa hacia la vertiente de Valdelinares, enlazando directamente con la famosa subida de la estación de esquí, uniendo así dos grandes desafíos de la comarca en una misma jornada. Se anima a los ciclistas a descubrir este puerto por su tranquilidad, longitud y belleza, una excelente opción para quienes buscan disfrutar de largos puertos, naturaleza y el inconfundible sabor del cicloturismo en Teruel.