| CIMA | AV16 |
| +info | https://www.altimetrias.net/aspbk/verPuerto.asp?id=385 |
| Relive | https://www.relive.com/es/view/v7O9ZxA7QQ6 |
| Reel | https://www.instagram.com/reel/DOQPVcUCB21/?igsh=NnU0c21sOHE3MXdr |
Nos encontramos en la provincia de Ávila, muy cerca de la localidad de El Herradón, donde arranca una de las ascensiones más exigentes de la zona: el puerto del Mediano. La subida comienza en un puente sobre el río Gaznata y desde prácticamente el primer metro deja claro su carácter, con una media que ronda el 9,5 % y un trazado que apenas concede respiros. Es un puerto corto pero muy intenso, ideal para quienes buscan puertos con alta exigencia en porcentaje.
La carretera se adentra desde el puente hacia una zona muy abierta y expuesta, donde es habitual que el sol y el viento jueguen un papel importante. Aun así, en jornadas de buena temperatura la subida se disfruta más, ya que no hay arbolado que proporcione sombra. Nada más salir de El Herradón encontramos ya las primeras señales que advierten rampas al 10 %, un buen anticipo de lo que nos espera más arriba: tramos duros encadenados con otros solo ligeramente más benévolos.
El primer kilómetro es especialmente exigente, rondando el 10 % de media sobre un asfalto rugoso y algo bacheado que obliga a elegir bien la trazada. Esta parte inicial se hace dura no solo por la pendiente, sino también por el firme irregular, lo que incrementa la sensación de dureza. Se recomienda llegar con un desarrollo generoso, ya que la combinación de porcentaje y mal estado del suelo puede pasar factura si no se gestiona con calma.
A medida que se avanza vamos encontrando algunos tramos reasfaltados que contrastan de forma llamativa con las partes más antiguas. Tras pasar junto a una primera granja, el firme mejora de manera notable y la bicicleta rueda con mucha más fluidez. Este cambio de asfalto coincide con un ligero respiro en la pendiente, con un kilómetro que se sitúa en torno al 8–9 % de media, lo que permite recuperar algo de aire y regular mejor el esfuerzo antes de volver a afrontar las rampas más serias.
La carretera mantiene un trazado bastante rectilíneo, con pocas curvas de herradura, lo que hace que la sensación visual de dureza sea aún más acusada: se ve perfectamente cómo la carretera va ganando altura sin apenas descanso. En varios puntos el porcentaje vuelve a situarse por encima del 12–14 %, con señales que reflejan claramente la entidad del puerto. El tráfico, en general, es escaso, lo que contribuye a disfrutar más de la subida, aunque conviene estar atento por los cambios constantes de firme y algún bache puntual.
El último kilómetro es, sin duda, el tramo decisivo y donde el puerto muestra su cara más severa. Al entrar en esta parte final volvemos a encontrar asfalto en mejor estado y, si el viento sopla de cara o de espalda, puede marcar la diferencia. Las rampas superan con facilidad el 13–14 % y aparecen puntos muy concretos donde el porcentaje se dispara hasta valores cercanos al 17–18 %, con picos puntuales que pueden incluso rebasar el 20 %. Es un segmento que obliga a exprimir al máximo el desarrollo disponible y a tirar de cabeza tanto como de piernas.
En esta zona final se afronta una herradura muy exigente, donde la pendiente alcanza sus valores más altos y en la que prácticamente resulta imprescindible disponer de un desarrollo compacto y una corona generosa (34x34 o superior) para poder subir con cierta solvencia. Incluso con desarrollos adecuados, las sensaciones son de auténtico puerto “de fuerza”, donde se progresa despacio y cada metro ganado se trabaja intensamente. Es un tramo ideal para quienes disfrutan midiéndose con rampas extremas y probando su capacidad de gestión del esfuerzo.
Cerca de la parte alta encontramos un cartel con la altimetría del puerto, un detalle que aporta empaque a la ascensión y que confirma la dureza de lo superado. No se sitúa exactamente en la misma línea de coronación, pero sirve como referencia clara de la entidad del Mediano dentro del catálogo de puertos abulenses. Además, forma parte del reto CIMA, de modo que muchos cicloturistas lo incluyen en sus objetivos, buscando sumar este coloso corto pero muy exigente a su colección de ascensiones.
Una vez coronado, el paisaje se abre a un altiplano que contrasta con la estrechez de la vertiente de subida. La sensación de haber vencido un muro es evidente, especialmente tras ese último medio kilómetro tan contundente. Al otro lado se observan algunos elementos singulares del entorno, como una serie de estructuras similares a dólmenes modernos, que ponen un punto curioso al tramo de falso llano tras el final del puerto y aportan un toque distintivo al lugar.
En conjunto, el puerto del Mediano se presenta como una ascensión corta pero muy intensa, con fuertes pendientes, cambios de asfalto y un tramo final realmente demoledor. Os animamos a afrontarlo con un desarrollo adecuado, tomándolo con calma y regulando bien desde el inicio para poder disfrutarlo dentro de su dureza. Es una subida ideal para quienes buscan puertos de alta exigencia en porcentaje y desean descubrir uno de los grandes retos de la provincia de Ávila.

Ascenso al Tourmalet desde Saint Marie de Campan con empinado paso entre edificios

Incluso Juan Sisto se tiene que bajar de su Fat Bike a veces